Muy buenos días queridos amigos.

Hoy me desperté temprano y salí a correr en Merida, caramba que pronto de desacostumbra uno a la humedad, solamente estaba a 95% y ya andaba sufriendo, jaja en realidad lo disfrute y volví a vivir esa belleza que tiene esta zona demuestro Pais, llena de matices verdes, olores diversos, gente bella y una brisa que viene del mar, ufff.

Ayer les escribí acerca de escuchar el corazón y no dejarse llevar solamente por la mente. 

Y doy gracias a todos los que amablemente me leyeron y se tomaron el tiempo de opinar, muy buenas opiniones definitivamente y eje voy a centrar en una de Juan Maximino, que me comenta de “..cuanto tiempo entonces es el justo y razonable para abandonar un proyecto ..”

“..donde queda eso de persistir aunque nonos vaya bien..”

Vayamos por partes.

Lo que intento explicar en mi articulo anterior es aprender a escuchar tu intuición, corazón, corazonada, punzada, o como le deseen llamar.

Vadim Zeland le llama “susurro de las estrellas en la madrugada”.

La mente usa los recursos que hemos aprendido desde niños y que como decía Jim, hemos decidido que son valiosos, o que nos han funcionado hasta hoy.

Ese sexto sentido de la intuición es diferente.

Zeland y muchos autores mas nos hablan del “Alma” y respeto mucho a quienes crean que eso no existe.

Usar la palabra. “Animado o desanimado” viene de eso mismo.

Pero vayamos al grano…!

Cuando emprendemos o vamos a emprender algo, vienen dudas, pensamientos, creencias, crisis, y estamos entre si lo hacemos o no, pero también hay algo dentro de nosotros mismos que nos grita emocionado, casi aplaudiendo “hazlo eso es lo que quieres..” O también una opresión dolorosa que te grita “.. no es eso lo que verdaderamente amas en la vida..”

Hacer lo que amas en la vida significa perseguir tu pasión.

También vale la pena recordar aquello de “aprende a hacer lo que no te gusta pero te conviene, para que después hagas lo que siempre has amado”.

Y si se fijan, se refiere esta frase a no renunciar a los deseos de tu alma, solamente que en este momento no puedes y te conviene hacer otra cosa.

Debemos de armonizar la mente con el alma y eso es encontrar tu pasión.

Cuando se da esta armonía, resulta que parece como si todas las cosas se dieran mágicamente y uno tiene esa sensación de “que fácil fue” o viene la exclamación de “es que nunca me imagine que fuera a pasar”.

Pero realmente es que se dejaron llevar por su verdadera pasión.

También les hemos dicho muchas veces “si esto no te apasiona, busca tu verdad..”

Mucha gente se queda en lo que hace, porque “no encuentra nada mas que hacer” o “no le queda de otra” o el clásico “pues que voy a hacer si no sé hacer nada”.

Todos tenemos en nuestro interior habilidades o destrezas a explotar, cosas que de niños nos encantaban al punto de no dejarnos dormir, esperando el amanecer para volverlo a hacer y que incluso de noche soñábamos qué estábamos haciendo.

Eso es escuchar el susurro de las estrellas en la madrugada.

Sí tienes que luchar y perseguir tu sueño… pero no él ajeno.

O tal vez si estas en tu pasión, pero por la puerta equivocada.

No es tu puerta!

Cuando tienes esa sensación de control, fuerza, y de que sabes que es lo que tienes que hacer, disfrutando cada paso aunque no resulte de inmediato, y ademas puedes ver con la imaginación la culminación de tu obra y disfrutarla aun cuando lo hayas llegado, entonces y solo entonces estarás persiguiendo tu sueño y de seguro tu alma estará de fiesta.