Muy buenos días queridos amigos :D

Estando el día de ayer por la tarde en casa, por fin en mi espacio de nuevo con mis cosas y por supuesto la familia, se me dejó venir el cansancio, tremendo que casi me quedo dormido en el sillón de la televisión a no ser por una terrible película que estaba viendo y decidí terminar la tortura para que nadie me diga que era una buena película.

Que semana más intensa la que recién terminó!

Viajé miles de kilómetros, hable con cientos de personas, corrí en dos de los lugares más hermosos imaginables al menos para mí como son Ibirapuera en São Paulo y La Primavera en Jalisco, para por fin el día domingo llegar de regreso a casa.

El cansancio es parte del precio que se tiene que pagar en el liderazgo y en verdad quienes amamos lo que hacemos lo pagamos con gusto y lo seguiremos haciendo mientras tengamos vida.

Pero ayer por la noche me fui a dormir temprano y a esperar el inicio de una nueva semana llena de oportunidad de continuar con la misión que tenemos en esta vida.

¿Qué tanto estás dispuesto a pagar el precio del liderazgo?

El cansancio es uno de ellos y definitivamente lo vas a sentir, y más con el paso de los años, porque bien recuerdo los momentos que podíamos viajar en camión de una ciudad a otra, para poner volantes, pancartas y luego hacer los HOM, para cerrar con entrenamiento y al día siguiente viajar a otra ciudad para volver a empezar.

Pero el tiempo si pesa, no pasa pero si pesa.

No es igual porque al ir sumando décadas vas perdiendo fuerza.

Me siento de una manera tal que mi cerebro me dice que puedo mucho más y ese día por la noche o al día siguiente mi cuerpo me recuerda la edad que tengo.

Esa es una de las razones por las cuales les digo a mis amigos que son mucho más jóvenes que yo, que ahora que tienen la fuerza y salud, deberían de entregarse con pasión desmedida en la persecución de sus sueños, porque llegará el día en que el cansancio los dome.

Yo me siento fuerte eso no hay duda, y me preparo día a día para tener mayor resistencia y procuro con mis disciplinas dominar mi cuerpo y agregar más que restar.

Pero cómo te sientes tú?

Que precio estas dispuesto a pagar tú?

A veces escucho algunos asociados que piensan en tomar las cosas con calma y llevársela tranquilo, y los entiendo y sin justificarlos solamente escucho.

Por qué habrías de hacer las cosas a medias si en esto se juega el futuro de tu familia?

Por miedoso o por mediocre?

Paguemos el precio de la lucha y sin desmayar vamos por una gran semana.

Por cierto que en esta semana tenemos los Equipo del Presidente un entrenamiento de dos días con Blair Singer que es la continuación del que nos dio el año pasado.

Ya lo espero con ansias porque en verdad que aprende uno con este señor.

Amigos los dejo por el día de hoy con la idea de ¨Por que no pagar el precio de una vez..."

Erika Vanessa dijo: "si de todas maneras te vas a despertar y levantar para vender y contratar, ¿por qué no mejor lo hacer bien todo de una vez?"

Vamos por una semana extraordinaria.